Retiros con Silvia Barton

Un Nuevo Renacer Desde hace tiempo, he sentido una profunda necesidad de transformación, un renacer que me permitiera comprender los porqués y paraqués de las situaciones en mi vida. Mi búsqueda comenzó con pequeñas meditaciones que hacía sola, leyendo e investigando. Aun así, las respuestas siempre parecían eludirme. Luego, en un giro del destino, viví la experiencia transformadora de la mano de Silvia y sus enseñanzas prácticas. Venciendo mi terquedad en cada oportunidad, me sumé al retiro "Constelar para sanar" en Capilla del Monte, un lugar lleno de energía y misterio. Durante esos días, participé en actividades de introspección que me llevaron a moverme de una manera que nunca antes había experimentado. Como la partícula electromagnética A-mor, que decidió moverse y desmultiplicarse originando este universo lleno de consciencias destinadas a despertar, yo también sentí un impulso interno. Comprendí que es en el movimiento coherente entre lo que sentimos, deseamos y pensamos que todo lo que soñamos viene a nosotros con facilidad, gozo y gloria. Incluso lo que consideramos imposible. Recordando el pasado con total neutralidad emocional, en 2016 estaba preparándome para correr la media maratón de Buenos Aires, pero un accidente de tránsito me dejó fuera de juego un mes antes de la carrera. Me enojé, me rehabilité, volví a entrenar, pero sin la motivación de la media maratón cerca. La mente rumiante y el ego pudieron más, y dejé de correr. Después todo ese periplo me sentía atrapada en una espiral de inercia. Los sueños comenzaron a truncarse uno tras otro y las situaciones desfavorables se presentaban constantemente, sumiéndome en un estado de desmotivación y depresión tan profundo que no veía salida. En ese océano oscuro en el que me hundía, me acompañaban enfermedades, una separación difícil seguida de un divorcio aún más doloroso, hijos en edad escolar que también sufrían, y un empleo cada vez más exigente en el que me sentía atrapada y sumaba puntos a la infelicidad. La ansiedad, el insomnio y los ataques de pánico se convirtieron en compañeros constantes. Sentía que estaba viviendo los años que se suponían los mejores de mi vida, pero en realidad, lentamente me dejaba morir. La desilusión frente a la vida era casi total, y había activado el piloto automático, dejándome llevar por la corriente. Si seguía así, mi destino final sería otro accidente de tránsito, pero esta vez fatal. Este retiro no fue solo un descanso del mundo exterior, sino un profundo viaje hacia mi interior. Además de las meditaciones guiadas, las caminatas silenciosas y las conversaciones sinceras con otros participantes, las constelaciones familiares nos permitieron sanar viejas heridas. No faltaron los espacios destinados a activar nuestro observador consciente y momentos de comunión sagrada, ya fuera con mates, comidas o simplemente compartiendo una charla con aquellos que, como yo, estaban dispuestos a renacer. Estas experiencias me permitieron ver con claridad las áreas de mi vida que necesitaban alineación y equilibrio. Fue un despertar de la conciencia, un llamado a vivir en coherencia con mi verdadera esencia. Al regresar del retiro, me sentí renovada y llena de energía. Entre los muchos movimientos que sobrevinieron, decidí retomar mis clases de yoga, una práctica que siempre me ha ayudado a mantenerme centrada y en armonía. Además, me inscribí en el gimnasio y comencé a caminar nuevamente. Escribo estas líneas hoy, 28 de julio, día en que se cumplen los 120 años de la fundación del club del que soy simpatizante. Entre los festejos, se organizó una carrera de 3 km participativa, y con mis amigas decidí inscribirme. No sabía en el momento de la inscripción que lograría hacer algo más que caminar. Volviendo al día de hoy, con una alegría impensada pude por momentos trotar sin siquiera pensar en rendirme. Disfruté cada paso, recorriendo las calles de mi barrio, rodeada de gente querida y en compañía de mis amigas de toda la vida, motivándonos como solíamos hacerlo cuando las cuatro corríamos juntas todas las carreras que se presentaban los fines de semana en Buenos Aires. Estos 3 km recorridos han sido más que una simple actividad física; son un símbolo de mi renacer. Me siento más viva y conectada conmigo misma que nunca. El “vuelco” de mi vida se manifiesta en una nueva profesión, poniendo mis dones al servicio de la humanidad, acompañando procesos en los demás, viviendo en coherencia, diciendo NO a lo que no resuena más en mi mundo y dejando atrás patrones, miedos y creencias en programas que impiden hacer uso de todo el potencial de la chispa divina que llevamos dentro. He aprendido que, como dice Joe Dispenza y Silvia nos recuerda en cada práctica o conversación, "nuestros pensamientos y sentimientos tienen el poder de crear nuestra realidad". Al vivir en coherencia, alineando nuestros deseos, pensamientos y emociones, podemos manifestar una vida llena de posibilidades infinitas. Este nuevo capítulo de mi vida es un testimonio de la fuerza del movimiento consciente y la magia que ocurre cuando nos permitimos renacer. Con cada paso, estoy creando un futuro lleno de nuevas oportunidades y experiencias significativas.

Hola Silvia ¿cómo estás ? He quedado anonadado de todo lo que he generado en la montaña con todo lo aprendido y practicado con la gran experiencia que nos brindas con tus conocimientos. Escalando el Kilimanjaro arriba de los 4200 metros de altura nos agarró una tormenta con lluvia a menos 10 grados bajo cero. Me agarré una neumonía con más de 39 grados de fiebre. Pero yo seguía concentrado en las meditaciones y en el gif mío haciendo cumbre. Y tres días después logré hacer cumbre y la verdad estoy feliz era algo imposible que con esa neumonía lo lograra pero sin dudas que las técnicas dan resultado porque lo logré. Después para bajar más rápido me recomendaron bajar en un helicóptero el cual tuve que pagar 3000 dólares y ahí me puse a pensar en un gif un el que me devolvían el dinero Y una semana después la empresa me decolvio el dinero por un sorteo que salió a mi favor Estoy que no lo puedo creer Vamos por más ¡¡¡Gracias por tantoooooo!!! Sos MI MENTORA PARA TODA LA VIDA